domingo, 8 de junio de 2025

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 141

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 141

Continuación...

Allí el evangelista aclara contundentemente para nosotros quien es ese Ser. “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios y el Verbo era DiosJuan 1: 1.

Esto en realidad es un misterio que no alcanzamos a comprender con nuestra mente finita. Solo sabemos que un Dios que no puede morir, es a la vez el Verbo que sí puede morir que será inmolado por Dios (el Padre) al principio al fundar al mundo. Ello solo podemos creerlo por la fe pues es verdad descrita en la Palabra. Pero eso no significa que la fe sea ciega valga decir.

Ahora note que todo ocurrirá en esa eternidad pasada. Pero cuidado con concluir desde allí que ese Verbo se llama Jesús pues eso es erróneo ya que ese nombre se revelaría hasta mucho tiempo después en una dimensión que todavía no había sido creada y cuyo significado tenía que ver con la misión de salvación para una raza que todavía no había sido creada hasta ese momento.

El Verbo que es Dios, posee por supuesto todas las características de Divinidad, Gloria y Poder que le son propias como Dios que es.

Ahora, ya que Dios es la Vida, no puede morir como ya mencionamos, su Santidad excelsa no es asequible para ningún hombre. Nadie puede mirarle directamente ni exponerse a Él sin protección porque muere irremediablemente. No tenemos forma alguna de accederle. Además, no puede ser tentado por el mal porque es Perfecto y completamente inmune a la maldad. Y se trata de un Ser que no puede ser vencido.

Esto también es vital comprenderlo y no perderlo de vista.

Pero regresemos a ese evento importante que define la fundación del mundo.

Continuará…


domingo, 1 de junio de 2025

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 140

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 140

Continuación...

Si hasta teorías científicas que se aceptaron como verdades absolutas por mucho tiempo como la evolución hoy se ven entredicho por descubrimientos y análisis de más factores que no se trataron cuando se postularon, ¿cómo es posible que nosotros pensemos que no hay más que hablar sobre un tema o al menos no nos demos la oportunidad de considerar los planteamientos que se nos hacen?

Los evangélicos pero principalmente los católicos consideran indudablemente que Jesús es Dios pero, ¿acaso creerlo de otra forma es torcer la Palabra?

Debían de meditar que esa creencia fehaciente de que Jesús es Dios, lleva ineludiblemente a tener que aceptar que María es la madre de Dios como se proclama en la religión católica, pero los evangélicos jamás lo aceptarán. Es una consecuencia lógica.

Así mismo si Jesús es Dios, entonces él es hijo de sí mismo lo cual es una conclusión aberrante.

Al final se hace una maraña doctrinal que nadie entiende y se cree en lo que se cree a ciegas. Pero la Palabra de Dios nunca pretende tal cosa.

Permítame presentarle mi argumento y después quédese con el criterio que desee.

Lo primero que debemos comprender y es vital, es centrarnos en lo que sucedió en la eternidad pasada y definiría la voluntad eterna de Dios el Padre respecto a una raza que aún no había creado.

Dios inmola (sacrifica) desde la fundación del mundo al Cordero según nos dice la Escritura, y lo hace para proveer solución a un problema que todavía no existe: el pecado de la humanidad. Pero desde allí, aquel que desde la eternidad se dispondría para que en el futuro llegase a ser Emanuel (Dios con nosotros), Yeshúa (Jesús), Cristo (el ungido) y el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo, no se conocería con ninguno de esos nombres en la eternidad pasada, sino solo como el Verbo. Es lo dicho por Juan el evangelista desde el inicio mismo de su evangelio. 

Continuará…