domingo, 31 de julio de 2022

Las “tres partes” del hombre 45° Parte

Las “tres partes” del hombre 45° Parte

Continuación…

Para el caso del espíritu angelical o el espíritu inmundo aunque tampoco tienen una forma definida, al materializarse pueden parecer uno de nosotros sin que nadie los diferencie -algunos sin saberlo hospedaron ángeles- (Hebreos 13: 2).   Pero recordemos que el Señor envió espíritus inmundos a cerdos, lo que nos dice en definitiva que no necesariamente tienen forma o figura humana siempre como para lograr introducirse en un ser vivo que no es humano. Sin embargo esto tampoco podemos tomarlo como norma pues es bien claro que esos espíritus pidieron permiso al Señor para poseer aquellos cerdos, no lo podrán hacer por decisión propia.  El reino de las tinieblas tiene limitaciones.

Pero el que Dios pone en el hombre, no se vio nunca, ni nadie puede describirlo como una figura de cual o tal forma. Cualquier disque espíritu que crean los hombres ver, le aseguro como ya dije antes, que no es ningún hombre sino demonios disfrazados. Los ángeles que son espíritus, Dios si les permitió tomar forma humana pues se manifestaron como hombres que en algunas oportunidades eran resplandecientes y en otras pasaron inadvertidos y nadie notó que fueran ángeles mensajeros de Dios.


¿Puede más de un espíritu habitar en el hombre?

Por lo que acabamos de analizar respecto al Espíritu de Dios, es totalmente factible. Sin embargo una vez que el Espíritu de Dios hace morada en el hombre, ningún otro espíritu salvo el que Dios le había dado le poseerá pues ya tiene un Dueño, Guarda y Protector.

Respecto a aquellos que viven sin Dios, definitivamente toda clase de malos espíritus (espíritus demoníacos o inmundos) les invaden pues tienen vía libre allí. Inclusive un solo hombre podría tener miles de demonios (legiones) viviendo en él e influenciándole para toda clase y tipo de maldad o padecimientos dicho sea de paso.

Solo Dios puede liberarles con la preciosa Sangre de Cristo. Pero no lo hará si ellos no se lo permiten.

Continuará…


domingo, 24 de julio de 2022

Las “tres partes” del hombre 44° Parte

Las “tres partes” del hombre 44° Parte

Continuación…

Qué forma -si pudiéramos bíblicamente establecer una- tiene el espíritu?

Siendo aliento de Dios no parece tener una forma al menos comprensible para nosotros. Jamás pienso en el espíritu como que fuese semejante a un vapor ni mucho menos una especie de campo magnético pues la biblia le da características de sentimientos como los tenemos los seres humanos. Puede entristecerse, agobiarse, alegrarse, estremecerse, conmoverse y mucho más.

Aún el mismo Espíritu de Dios, cuando vino en Pentecostés se manifestó visiblemente como lenguas de fuego sobre las cabezas de los creyentes pero en el bautismo de Jesús tomo forma corporal revoloteante similar a una paloma. No dice por ninguna parte que era una paloma sino que se asemejaba a una por la forma en que se le vio movilizarse. Por eso tal comparación. Así que decir que el Espíritu de Dios es una paloma literalmente hablando, no está en la biblia. La religión es la responsable de dibujarlo así.

Tampoco el Espíritu Santo es el aliento de Dios. Eso no lo dice por ninguna parte en la Palabra. El espíritu del hombre es el que es su aliento. El que le hace ser un ser viviente.

Creer que el espíritu que le ha sido dado al hombre sea literalmente un soplo se refiere a una terminología griega pero es estar confundido con comparaciones erróneas una vez más.

Aunque el Señor sopló el Espíritu Santo a sus discípulos cuando les dijo: “Recibid el Espíritu Santo” (Lucas 20: 10). Sabemos que era un adelanto de Vida y Fortaleza hasta que viniera a ellos con toda su plenitud tiempo después en Pentecostés.

Así mismo, el Espíritu Santo nada tiene que ver con ser una fuerza energizadora o activa de Dios -como lo definen los testigos de Jehová- ni nada que se le parezca poniéndolo en el plano de un ente inanimado, pues la Palabra lo presenta como ya vimos como un ser que tiene conocimiento (conoce lo profundo de Dios), tiene sentimientos, habla, se entristece, enseña, guía, consuela, reparte, capacita, reprende, alerta, etc, todo muestras y características de un ser vivo e inteligente capaz de potenciar al hombre más allá de sus capacidades normales y naturales.

Continuará…


domingo, 17 de julio de 2022

Las “tres partes” del hombre 43° Parte

Las “tres partes” del hombre 43° Parte

Continuación…

Qué forma o imagen tendrá el cuerpo resucitado?

Definitivamente será como nosotros pero tendrá rasgos que lo harán parecer otra persona o al menos visiblemente no será una copia textual del primer cuerpo que se tuvo. Será indestructible, además no lucirá viejo pues la vejez es el resultado del paso de los años en esta dimensión y sus efectos para con toda la materia incluyéndonos. Sin duda tampoco lucirá pasado o falto de libras porque la que se pone obesa es la carne que alimentábamos, no tendrá ningún tipo de padecimientos propios del cuerpo que conocemos. Sin embargo, podría mostrar ciertos rastros de heridas que tuvo el primer cuerpo pues se formó para resucitar con base en rasgos de aquel. Así que en alguna medida podría inclusive hasta parecerse a otra persona por muchos de sus cambios físicos acorde a aquellos de cómo al final de la vida se conocieron.

Digo todo esto no como una fábula, escudriñe las características del cuerpo que tuvo Cristo el Señor al resucitar y comprenderá el fundamento de lo que estoy diciendo.

Al Señor sus discípulos ciertamente no le reconocían después de resucitar, su cuerpo mostraba las señas y orificios que le habían ocasionado los clavos y la lanza con que le atravesaron cuando le crucificaron, pero ellos supieron en definitiva que era Él hasta posteriormente. Dicho cuerpo tenía la capacidad de materializarse o desaparecer, podía atravesar paredes, podía comer, y aún ser tocado, no era una figura espectral ni nada por el estilo, en fin, creo que tanta información que nos aporta la Palabra de Dios respecto a este cuerpo nos brinda una guía para comprender cómo será el cuerpo que también tendremos.

De algo puede estar seguro, percibirá, sentirá, pero en el caso del cuerpo glorificado de los creyentes, estará exento de dolor, cansancio, sueño, hambre, etc. No será carne como esta carne, ni sangre como la que tenemos en este cuerpo actual, será un cuerpo adaptado para la eternidad.

Continuará…


domingo, 10 de julio de 2022

Las “tres partes” del hombre 42° Parte

Las “tres partes” del hombre 42° Parte

Continuación…

En el plano material cuando cualquier cosa se destruye no deja de existir. Solo queda en ruinas. Y aunque en ruinas, puede ser transformada o reciclada en alguna otra cosa pero la materia como tal no deja de existir.  Hablando de ciencia ¿no? Aunque el alma no es material, solo Dios tiene el poder de destruirla. El concepto de destrucción continúa siendo igual y no significa que el alma se desvanece.

Tenemos conceptos en nuestra mente sumamente errados sobre la muerte, existencia y destrucción que debemos rectificar para arrojar la luz que necesitamos para una buena comprensión de la Palabra.

Pasemos ahora a abordar algunas preguntas interesantes que se podrían desprender de lo que vemos.

Qué forma -si pudiéramos bíblicamente establecer una- tiene el alma?

Si el rico reconoció a Lázaro que por cierto ya no lucía harapos, si Moisés era reconocido como tal aún cuando aquellos discípulos nunca le habían visto, si el rico supo quién era Abraham aunque tampoco nunca lo había visto, quiere decir que el alma muy probablemente tenga nuestra misma imagen solo que con ciertos cambios pues recordemos que lo que se envejece y cambia sustancialmente es nuestro cuerpo pues no vive eternamente. No creo que el alma tenga forma de un niño pero sí creo que es mucho más joven y plena de lo que somos por fuera. De hecho el alma no envejece pues es eterna. 

El apóstol Juan vio las almas de los que habían muerto, pequeños y grandes… y reconoció gentes o personas, no vio figuras abstractas o algo que no pudiera interpretar. (Apocalipsis 20: 12) y de que vio “pequeños” y “grandes” no se refiere a niños y adultos sino a personas que  tuvieron grandeza y otros que no en este mundo.

Continuará…


domingo, 3 de julio de 2022

Las “tres partes” del hombre 41° Parte

Las “tres partes” del hombre 41° Parte

Continuación…

¡Qué confusión indescriptible será para ellos pensar que les resucitaron porque ya habían purgado sus maldades en el sufrimiento en que se encontraban experimentando en el Hades o infierno y verse de pronto ante el Dios que negaron para recibir su condena definitiva! ¡Horrible realidad!

Parece que jamás lo entenderán. Continuarán en confusión eterna. Imagino a muchos con religiones mentirosas y guías espirituales engañosos que les prometieron sin número de cosas maravillosas -según ellos- entre placeres y siendo quizá dioses… y miren donde terminaron.

Resumo, cuando el hombre muere, su cuerpo “dormirá” en el polvo de la tierra. Este dormir significa cesar toda acción o actividad en este mundo (muy similar a cuando dormimos, solo que estamos vivos en el cuerpo cuando lo hacemos); su alma que es él, viva irá a una de dos antesalas (o para los salvos o para los perdidos); y su espíritu que no era él ni de su propiedad, volverá a Dios que lo dio.

Cualquiera de las muertes que experimente el hombre, tiene el mismo efecto. Se trata de la separación de la vida. Ninguna define dejar de existir. Eso no existe para nadie.

En este mundo, el espíritu separado de la Vida por causa del pecado, permanecerá dentro del hombre inhabilitado mientras este vive, permitiéndole únicamente al hombre ser un ser vivo. Cuando muere aquí, el espíritu regresa a Dios. El alma por su parte, que había permanecido viva dentro del hombre toda su vida en esta dimensión, continúa viva después de que abandona el cuerpo y seguirá viva experimentando la destrucción por siempre en su condenación eterna  (Lucas 12: 4 y 5). Este pasaje es sumamente revelador.

De nuevo, esta destrucción del alma no se refiere bajo ninguna forma a desaparición o desintegración, sino su acabose final separada por siempre de quien fuera su fuente y sostén, Dios.

Continuará…