domingo, 10 de julio de 2022

Las “tres partes” del hombre 42° Parte

Las “tres partes” del hombre 42° Parte

Continuación…

En el plano material cuando cualquier cosa se destruye no deja de existir. Solo queda en ruinas. Y aunque en ruinas, puede ser transformada o reciclada en alguna otra cosa pero la materia como tal no deja de existir.  Hablando de ciencia ¿no? Aunque el alma no es material, solo Dios tiene el poder de destruirla. El concepto de destrucción continúa siendo igual y no significa que el alma se desvanece.

Tenemos conceptos en nuestra mente sumamente errados sobre la muerte, existencia y destrucción que debemos rectificar para arrojar la luz que necesitamos para una buena comprensión de la Palabra.

Pasemos ahora a abordar algunas preguntas interesantes que se podrían desprender de lo que vemos.

Qué forma -si pudiéramos bíblicamente establecer una- tiene el alma?

Si el rico reconoció a Lázaro que por cierto ya no lucía harapos, si Moisés era reconocido como tal aún cuando aquellos discípulos nunca le habían visto, si el rico supo quién era Abraham aunque tampoco nunca lo había visto, quiere decir que el alma muy probablemente tenga nuestra misma imagen solo que con ciertos cambios pues recordemos que lo que se envejece y cambia sustancialmente es nuestro cuerpo pues no vive eternamente. No creo que el alma tenga forma de un niño pero sí creo que es mucho más joven y plena de lo que somos por fuera. De hecho el alma no envejece pues es eterna. 

El apóstol Juan vio las almas de los que habían muerto, pequeños y grandes… y reconoció gentes o personas, no vio figuras abstractas o algo que no pudiera interpretar. (Apocalipsis 20: 12) y de que vio “pequeños” y “grandes” no se refiere a niños y adultos sino a personas que  tuvieron grandeza y otros que no en este mundo.

Continuará…