viernes, 25 de abril de 2014

¿Cómo se distribuían los recursos en la iglesia del Nuevo Testamento? 1° Parte

¿Cómo se distribuían los recursos en la iglesia del Nuevo Testamento? 
1° Parte
Escrito autóctono

“Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio”. 1° Cor. 9: 14; “Pues la Escritura dice: No pondrás bozal al buey que trilla; y: Digno es el obrero de su salario”. 1° Tim. 5: 18

Pongamos en orden un tema que ha sido tan mal interpretado y que se desvió lamentablemente a excesos por siglos en el seno de la iglesia.

Es claro que el Nuevo Testamento (NT) plantea el sostenimiento de obreros por parte de la iglesia. Eso no está en discusión. Sin embargo, mirando la iglesia moderna y los abusos financieros nefandos que en ella se han cometido por algunos inescrupulosos, urge un análisis concienzudo y bien fundamentado de cómo debe realizarse una sana administración de los recursos.

Aunque le parezca increíble, nunca dineros y recursos dedicados por Dios a la raza levítica, llámese diezmos, primicias, ofrendas, fiestas, sacrificios o algún otro, se usaron para levantar obras ni edificaciones en Israel. Vimos en nuestro tema anterior “El corazón de Dios sobre el uso de los recursos…” qué fin específico se le dio históricamente a todo lo que el pueblo traía y además cómo se debía atender así mismo a las viudas, huérfanos, extranjeros y necesitados.  Toda vez que Israel requiriera realizar alguna obra material o edificación, lo hacían con donaciones extraordinarias que el pueblo aportaba.

Entonces, ¿Cómo operó esto en la iglesia del Señor ya en el Nuevo Testamento? ¿Qué es lo que se da a personas que se dedican a trabajar en la obra de Dios? y muy importante, ¿quienes pueden y deben considerarse para un eventual sostenimiento? Dichosamente la Palabra de Dios no deja esto en el misterio. Brinda argumento suficiente y claro para entenderlo y aún más, para rectificarlo si verdaderamente queremos obedecer de forma honesta lo que ella nos ordena.

El total del recurso que se trae al Señor en la iglesia, si hacemos un estudio más exhaustivo, realmente está conformado por mucho más que solo ofrendas más el 10% (llamado diezmo) que de por si no debería haberse implementado en ella, aunque muchos lo defienden a capa y espada hoy. El recurso bíblicamente hablando se obtenía más bien de la generosidad (forma en la iglesia) y no de la legalidad (forma en que lo hacían los israelitas), según se confirma en el NT. También, tal y como le pasaba al mismo Señor, recibían ofrendas de simpatizantes del evangelio que no necesariamente eran parte de la iglesia. Recordemos que el ministerio del Señor recibía sostenimiento de mujeres esposas de gobernantes y hasta de algunos maestros de la ley que creían en Él en oculto. (Lucas 8:1-3)

Reitero que en el caso de los judíos en el antiguo pacto, de todo lo que ellos debían separar para Dios, el diezmo de sus recursos tenía como finalidad el mantenimiento sacerdotal (la tribu de Leví), sin dejar de lado las ofrendas, primicias, sacrificios y diferentes fiestas que realizaban que también generaban más recursos.

De toda aquella cantidad que era monumental (12 tribus en total dando a una sola tribu ese 10% junto a los otros rubros), comían los sacerdotes y como ya lo vimos, también los necesitados. Además estos últimos, tenían la posibilidad de recoger en temporada de cosechas, lo que dejaban caer los segadores igualmente para su mantenimiento diario (Rut 2:7), y se les había otorgado el séptimo año de cosechas dedicado para alimentarles (Éxodo 23:10-11). No se les cobraba por ello y quien lo hiciera o les dificultara esa acción, pervertía su derecho.


Continuará…

lunes, 21 de abril de 2014

El corazón de Dios sobre el uso de los recursos en su casa (4° Parte) y última

El corazón de Dios sobre el uso de los recursos en su casa (4° Parte) y última
Escrito autóctono

Continuación…

Le recomiendo no solo ver el comentario que hago a la par de cada uno de los pasajes anotados sino ir a su Biblia, leerlo y corroborarlo para que se convenza y cambie su manera de pensar.


2° Cor. 8 (continúa hablando de donativos y ofrendas para los hermanos necesitados)
2° Cor. 9: 1 - 15 (lea el interesante contexto de los textos con que tanto insisten algunos líderes tradicionales para pedir ofrendas para cualquier cosa menos para lo que dice la Palabra)

Gálatas 2: 10 El ministerio de Pablo  “acordarse de los pobres”
Gálatas 6: 10 Mayormente a los de la familia de la fe.

Ef. 4: 28 Trabajar para compartir

1° Tim. 5: 8 El que no provee para su casa ha negado la fe
1° Tim. 5: 3, 9, 10, 16  La iglesia primitiva cuidaba de las viudas desvalidas

Tito 3: 14  (ocuparse en buenas obras para los casos de necesidad para no estar sin fruto)

Santiago 1: 27 (la verdadera religión)
Santiago 2: 14 – 16 (no ver por los hermanos en necesidad material es tener una fe muerta)

1° Juan 3: 16 – 17 (poner la vida por los hermanos en amor, compartir los bienes con los necesitados)


En vista de un argumento tan sólido en toda la Escritura -muchísimo más presente que el diezmo valga mencionar- destaca la línea clarísima de la voluntad de Dios sobre la finalidad de los recursos en su Reino. Creo que no estaría demás arrepentirnos, replantear nuestras inversiones económicas de una vez y por todas y rectificar nuestras acciones, porque ¿Cómo habremos cambiado la dirección de los recursos en mil y una formas diferentes a lo que Dios estableció contundentemente para que se usaran?

Lo que vemos hoy en las dizque iglesias cristianas (y no me refiero a alguna en particular sino a todas las que dicen fundamentarse en la Palabra de Dios), ni siquiera se le acercan a la doctrina vivida por Israel, practicada por el Señor, enseñada por los apóstoles y vivida por los hermanos del primer siglo según relatan las Sagradas Escrituras, aquella que es y debiera seguir siendo la forma de iglesia que deberíamos vivir. Por eso creo firmemente que no hay excusa delante de Dios. Cada uno de nosotros deberá responderle al Señor lo que hicimos con los recursos que Él nos otorgó, y no nos preguntará si obedecimos a las prácticas de una denominación cualquiera sea, sino que pesará nuestros actos conforme lo que nos enseñó en su Palabra. Es por lo que le motivo, no delante de ningún hombre sino delante de Dios, a que comience a depositar sus recursos en la Casa del Señor la cual no es ningún edificio material ni tampoco ningún líder que se los pida, porque la Casa del Señor según el Nuevo Testamento es usted mismo de manera individual, pero también las personas (sus hermanos en la fe) de forma corporativa, aquellos que mira o pueden estar teniendo necesidades indecibles y nadie mueve un dedo por su causa.

Lo que le he mostrado y lo que le diré a continuación, le podrá sonar muy radical pero es la verdad: Quizá ha diezmado y ofrendado toda su vida a uno u otro lugar al que ha asistido y que llama “iglesia”, pero le puedo asegurar que de manera práctica nunca o casi nunca, ha depositado un centavo a la Casa del Señor.

Y eso no es todo, veremos algo esencial en la Palabra de Dios en nuestro siguiente tema.


PRÓXIMA PUBLICACIÓN: ¿Cómo se distribuían los recursos en la iglesia del Nuevo Testamento?

lunes, 14 de abril de 2014

El corazón de Dios sobre el uso de los recursos en su casa (3° Parte)

El corazón de Dios sobre el uso de los recursos en su casa (3° Parte)
Escrito autóctono

Continuación…

Le recomiendo no solo ver el comentario que hago a la par de cada uno de los pasajes anotados sino ir a su Biblia, leerlo y corroborarlo para que se convenza y cambie su manera de pensar.


Nuevo Testamento
La enseñanza de Cristo en sus tiempos
Mat. 19: 16 (El joven rico)
Mat. 23: 14 Jesús acusa a los escribas y fariseos (dirigentes religiosos) que atentan contra los recursos de las viudas.
Mat. 25: 35 – 40 (“a mi lo hicisteis”) la diferencia entre ovejas y cabritos (tuve hambre, sed, fui forastero y me recogisteis, desnudo, enfermo y me visitasteis, en la cárcel y vinisteis a mi)
Mat. 26: 6 Cuando la mujer derramó el perfume sobre Jesús

Luc. 19: 8 Zaqueo daba la mitad de sus bienes a los pobres

San Juan 13: 29 (La bolsa) (En la Cena del Señor)

Hasta aquí cualquiera podría decir que esto fue una costumbre (-un momento-, debía ser una práctica) para los judíos. Se podría argumentar aquí que esa atención era un asunto exclusivo judío y nada tendría que ver con los gentiles. Pero veamos la enseñanza apostólica y la vida de la iglesia. Notemos que esa enseñanza se extendió a las  iglesias gentiles igualmente.

Doctrina apostólica y vivencia en la iglesia
Hechos 6: 1 – 6  (Propósito de los servidores)
Hechos 20: 34 y 35 (el ejemplo de Pablo respecto a trabajar para ayudar a los necesitados)

Rom. 12: 10 (Preferirse entre los hermanos)
Rom. 12: 13 (compartiendo para las necesidades de los santos)
Rom. 15: 26  Macedonia y Acaya recogieron ofrendas para los pobres de entre los santos de Jerusalén

1° Cor. 12: 22 – 26 (Los miembros más débiles, necesitados o menos decorosos en el cuerpo)
1° Cor. 13: 3 (repartir bienes entre los pobres sin amor no es nada)


Continuará…

viernes, 4 de abril de 2014

El corazón de Dios sobre el uso de los recursos en su casa (2° Parte)

El corazón de Dios sobre el uso de los recursos en su casa (2° Parte)
Escrito autóctono

Continuación…

Le recomiendo no solo ver el comentario que hago a la par de cada pasaje mencionado sino ir a su Biblia, leerlo y corroborarlo para que se convenza y cambie su manera de pensar.

Sal. 68:5 (Dios mismo es padre de huérfanos y defensor de viudas)
Sal. 72: 12 y 13 (Dios mismo libra, tiene misericordia y salva al....)
Sal. 82: 3 y 4 (Mandamiento del Señor: defender, hacer justicia y librar al necesitado, afligido y al huérfano)
Sal. 146: 9 (Dios mismo guarda al extranjero, sostiene a la viuda y al huérfano)

Pr. 14: 21 (bienaventurado el que tiene misericordia de los pobres), 31 (Honra a Dios el que tiene misericordia de los pobres, el que los oprime, lo afrenta a Él);
Pr. 15: 25 (Dios mismo afirmará la herencia de la viuda)
Pr. 19: 17 (El que da al pobre a Jehová presta)
Pr. 29: 7 (el justo conoce la causa del pobre)
Pr. 31: 9 (el Rey debe defender la causa del pobre y menesteroso)

Isaías 1: 17 (-llamado al arrepentimiento - entre la lista hacer justicia al huérfano, amparar a la viuda)
Isaías 10: 1 y 2 (ira y juicio de Dios para quienes dictan leyes injustas y les tiranizan)
Isaías 25: 4 (Dios mismo es fortaleza al pobre y menesteroso)
Isaías 41: 17 (Dios mismo les oye y no los desampara)
Isaías 58: 7 (el verdadero ayuno, el que escogió Dios), 10 (la promesa de Dios)

Jer. 7: 6 (no oprimir al huérfano)
Jer. 22: 3 (no oprimirles), 16 (conocerle a Él es juzgar la causa del afligido y menesteroso)
Jer. 49: 11 (Dios mismo se encarga de cuidarlos)

Ez. 18: 7 (Entre las características del justo está...)
Ez. 22: 7 (Dios reprocha a Jerusalén – sus pecados-)

Zac. 7: 9 y 10 (desobediencia, causa del cautiverio) oprimir al pobre, al huérfano, a la viuda y al extranjero en la lista

Mal. 3: 5 (El Señor mismo será testigo contra quienes defraudan a la viuda, al huérfano y hacen injusticia al extranjero)


Continuará…