domingo, 21 de enero de 2018

Llevad mi yugo sobre vosotros… (2° Parte)

Llevad mi yugo sobre vosotros…  (2° Parte)
Escrito autóctono

Continuación…

Me llama la atención la letra de una bonita canción de un compositor cristiano que dice “Buenos días mundo, aquí vamos otra vez…” Parafraseo el sentido a mi entender: “Luchas, ¡qué! ¿Otra vez hoy?... Testaruda rutina.”

Compagina muy bien con la oración de muchos: “Señor, te ruego me ayudes hoy porque yo ya no doy…”  Prácticamente un grito de S.O.S. al cielo.

Pero… ¿imaginamos al Señor con una misión como la que tuvo cuando estuvo entre nosotros, bregando en este mundo así?; recordemos que vino a ser humano como nosotros sin estar exento de nada y era Él solo contra el mundo. ¿Imaginamos a los apóstoles (hombres comunes como usted o yo) teniendo tal visión de su labor cuando se enfrentaron a la monumental tarea de la iglesia?; recordemos que al menos eran a 500 que debían atender 12 al principio y sin esperárselo ni pedirlo fueron 500 X 7 dividido entre 12 de un día para otro . Y como si no bastara, a la vuelta de la esquina se duplicó la cifra. ¿Imaginamos a la iglesia implorando socorro al Señor cuando debían afrontar persecuciones y maltratos? ¿Sabe qué?, no creo que hubiesen llegado muy lejos en su alcanzar al mundo.

¡Qué!, ¿acaso sus problemas no eran tan serios? Le aseguro que sí, y muy serios, pero no los veo en ninguna parte quejarse, ni dudar de sus convicciones ni permanencia.

No se me tome por desconsiderado con mis hermanos sufrientes por las situaciones anómalas que les genera su trabajo para Dios, pero… ¿acaso vinimos a esta vida a tener que estar en una descomunal lucha con todo y hasta con nosotros mismos en nuestra carnalidad por servirle a Dios, llegando a la noche prácticamente respirando por la boca?

La respuesta es un no, pero no un “no” de simple negación sino un “no” de que estamos hace tiempo equivocando el camino y gastando energías valiosísimas de forma innecesaria.


Continuará…