domingo, 6 de mayo de 2018

Lo más leído (Top 20 de Publicaciones) PUBLICACIÓN 16


Lo más leído (Top 20 de Publicaciones) PUBLICACIÓN 16

Seguimos compartiéndole esta serie sobre las publicaciones más leídas de nuestro blog, recordándole que las presentamos de forma aleatoria y no conforme al volumen de visitas que generaron. Sin duda querrá leer los temas completos para una mejor comprensión. Le instamos a hacerlo y para ello le facilitamos en cada título su fecha de publicación para que pueda ubicarla en nuestro archivero.  Le bendecimos y oramos al Señor porque cada publicación le ayude a cimentar su fe.

Publicación 16
Lo que Dios bendice y lo que nosotros bendecimos (1º parte)
Ubíquelo en la fecha 19-12-2015
Escrito Autóctono

Bendición; palabra muy usada por muchos pero a ciencia cierta gran cantidad no comprende su significado.

La bendición de manera simple, es todo cuanto nos produzca sentimientos de satisfacción y estado de bienestar en el marco de la pureza. Podríamos decir que se refiere a todo lo bueno que recibimos o que nos pasa. Resalto la pureza, porque hay cosas que brindan bienestar y deleite que no son necesariamente bendición y obedecen a apetitos de la carne más que otra cosa.

Por ejemplo llamamos bendición a la salud, al alimento que Dios pone en nuestras mesas, a la inteligencia que Dios nos da. Llamamos bendición a un nuevo día que se nos permite vivir, a la vida misma, al aire que respiramos; llamamos bendición a tener buenos hijos, a ser amados, a compartir con personas que nos aprecian, a tener buena relación con nuestros semejantes, a lograr un sueño por el que luchamos, a dormir bien, a salir y regresar con bien. Llamamos bendición a tener económicamente lo necesario cuando se necesita, al techo que nos cobija, a la mano que se extiende a ayudarnos.

Pero hay cosas que parecen no ser buenas que se tornaron en bendición para alguien como por ejemplo no lograr tomar el autobús a tiempo y enterarse después que tuvo un accidente serio donde se produjeron heridos.
 
Dice la Palabra de Dios que: “Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre...”  (Santiago 1: 17) y que Dios tiene pensamientos de paz y no de mal para nosotros (Jeremías 20: 11).

Conociendo a Dios comprendemos que Él hizo todas las cosas pensando en que pudiésemos estar bien, que fuésemos plenos y tuviésemos felicidad. Mirándonos en nuestra condición pecaminosa, hizo todo cuanto estuvo en sus manos para no dejarnos así ni que nos perdiéramos, entregó hasta su posesión más preciada por nosotros, a su hijo.

Así que la fuente de toda bendición es Él. Al amarnos decidió darnos todas sus bendiciones y son las que disfrutamos día a día por medio de Cristo.

Continuará…