La Voluntad de Dios para mi vida (15°
Parte)
Escrito autóctono
Continuación…
Abraham, otro de quien no sabríamos nada si no
procede a alinearse y obedecer la voz de Dios, su Voluntad. Este es un caso
interesante pues en verdad Abraham, antes de que Dios se le revelara, no lo conocía
como para que podamos decir que vivía en su Voluntad. Es parte de una
civilización alejada de la zona en que Dios ya tiene un plan establecido. Un
país inclusive con otros dioses y costumbres. Pero Dios en un momento dado, le
dice que salga de su tierra, y abandone sus ancestros y raíces y se vaya a otro
lugar que no conoce. Abraham que entonces se llamaba Abram, toma a su familia
entre los que están su mujer, padre, y sobrino y abandona sus amigos, cultura y
futuro posiblemente prometedor como hombre adinerado y se va obedeciendo a un
Dios que no conoce y a un lugar extraño que ni siquiera sabe cuál es sino hasta
mucho después que Dios se lo muestra. Hasta este
momento no se le ve buscando la Voluntad de Dios para su vida; esta lo alcanza.
De hecho la única vez que decide hacer algo por cuenta propia lo que hace es
complicarse la existencia. Pero con el tiempo aprende a conocer a ese Dios y Dios
se hace su amigo al punto que le comparte las cosas que haría y le muestra un
evento dentro de su Voluntad, no porque Abraham se lo pidiera sino porque Él se
lo quiso mostrar. Posteriormente y aún cuando Dios le solicita algo que no
calzaba con su Voluntad primera de darle una descendencia enorme, Abraham no
cuestiona a Dios ni le pide razones, demostrando cuánto le amaba lo que lo
llega a convertir en el Padre de la fe. Puedes
leer toda su historia y él nunca está intentando averiguar nada más allá de lo
que Dios le ha mostrado. Su nivel de confianza y amistad con Dios le lleva a
conocerle inclusive como un Dios de justicia que no castigará al justo junto al
impío. Pero hasta allí. No hay en la historia de Abraham nada que nos diga otra
forma de asimilar la Voluntad de Dios ni recomendación a que estemos buscando
una personal para nuestras vidas en ningún momento de su experiencia.
José el hijo de Jacob, Dios le comunica otro
evento dentro de su Voluntad mostrándole como un día sus hermanos y su familia
se postrarán ante él. Nada halagador para ellos evidentemente. Dios solo se lo
muestra pero no le dice cómo llegará allí ni qué debía hacer para alcanzarlo.
Pero esa Voluntad establecida de Dios lo separa de los que más lo aman, es
vendido como mercancía, vive como esclavo, es enviado injustamente a la cárcel
y nada parece caminar al lado de lo que Dios le había enseñado años antes. Sin
embargo ni antes, ni ahora José busca la Voluntad de Dios para su vida,
simplemente se deja llevar por los acontecimientos quizá dudoso en su corazón
muchas veces, pero esta ya le había alcanzado y lleva las cosas por el designio
de Dios hasta el final que ya estaba dispuesto por Él. Conocemos la historia.
Note, nunca se le vio buscando la Voluntad de Dios para su vida.
Continuará…