¿Se trata entonces de satanizar un local? Parte 6
Continuación…
Y todo eso y más fue el legado de la cruz. Nada de eso pasaba antes de ella.
No, ni un edificio local ni una casa en si misma supera la belleza de que en cualquier parte en que estén los santos, puedan gozar del poderoso fuego de Dios y por supuesto que Cristo el Señor asegure estar en medio de ellos como es su promesa.
¡Qué! ¿Se necesita algo más?
Entonces ¿Qué defienden los que anteponen un local frente a todas estas bendiciones?
Si lo analiza, los hermanos del primer siglo también lo comprendieron claramente. Observe que muchas de las acusaciones falsas que les hacían es que hablaban contra el templo algo tan sagrado para los judíos, como si eso se hubieran propuesto.
Claro, para esos judíos se trataba de un ataque frontal a su sacrosanto templo y eso no lo podían resistir. Más en realidad ningún creyente tenía tal objetivo en su corazón. Ellos habían comprendido claramente los beneficios de Cristo el Señor en sus vidas y si lo nota, esos hermanos no corrieron a edificar locales-templos en ninguna parte ni los promovían para nadie en ningún sitio a pesar de que eso es lo que habían vivido en su judaísmo durante cientos de años antes de conocer a Cristo. Curioso, ¿no?
El mito del local santificado terminó en la cruz y hoy es solo un edificio corriente. Bueno, seguiría siendo un edificio corriente, pero al ser derribado hace 2000 años por el general romano Tito tal como lo predijo el Señor y en 2000 años no se volvió a edificar; ¿cree que si hubiese tenido un propósito sempiterno del Señor para sus planes posteriores a la cruz, hubiese permanecido tanto tiempo inhabilitado o hubiese dejado que lo derribaran?
Lo que las religiones construyen no son templos, aunque así los llamen. Los locales que santifican, ni están santificados ni avalados por Dios. Todo lo sagrado que le digan que son, es pura religiosidad, manipulación y mentira.
Continuará…