domingo, 28 de mayo de 2017

Una Nueva Forma para vivir (6° parte)



Una Nueva Forma para vivir (6° parte)
Escrito Autóctono

Continuación…

Pero, ¿estaremos empeñados en que desaparezcan las mal llamadas iglesias de nuestros tiempos o es nuestro propósito falsearlas y destruirlas?

¡No, contundentemente! Amado lector, nada de esto representa un ataque a denominación alguna ni movimiento religioso. Tampoco a ninguna persona o líder. Si esta verdad planteada le causa molestia, tendrá que arrancar las páginas de la biblia. Su problema no es conmigo ciertamente, es con la Palabra de Dios que ha sido presentada sin alteración de ningún tipo tal cual está disponible para todos. Usted la posee y puede comprobarla.

Pero si los cristianos modernos quieren seguir gastando millones en recursos o permiten que se sigan utilizando para continuar edificando inmuebles, es su problema. Al fin y al cabo están haciendo exactamente lo mismo que por siglos han hecho sus padres dejando un legado material muy visible y artesanal, casi típico y hasta cultural de su paso por el mundo y no a Cristo. Me atrevo a pensar que hasta allanándole el camino al Anticristo, dejándole todo el recurso que él utilizará para resolverle el problema de la pobreza al mundo cuando aparezca. ¿Puede imaginar la incalculable riqueza material que representan tantos edificios construidos, tantos terrenos adquiridos, tantos recursos en medios y enseres que han amasado los disque seguidores de Cristo por cientos de años?

Ya vimos en la Palabra que tal proceder no tiene sentido alguno. De hecho ni Dios se inmiscuye en esas cuestiones de tesoros terrenales, no son su asunto. Cada quien dará cuenta a Dios de la forma en que utilizó los recursos que Él le proveyó y para los que estableció una mejor forma de invertirlos que no tenía nada que ver con construir edificios, alquilar locales o comprar terrenos, entre muchos otros que no requieren mención porque usted los conoce.

En la Palabra de Dios vemos claramente como Él estableció una nueva y mejor forma en que debíamos estar ocupados, nada de eso con que ahora se carga a los creyentes.

En fin, allí está la Palabra disponible para el que quiera leer, y el Espíritu para quien quiera ser enseñado, y el sacrificio hecho en la cruz para quien quiera ser libre.

Quien quiera imprecar lo planteado aquí, lo hará defendiendo una tradición recibida. Lo hará sin fundamento bíblico (no lo puede sostener en la Palabra ni respaldarse en Dios); lo hará sin fundamento histórico, ni arqueológico.

Lo hará solo por no darse por menos.

…¡Impresionante!, “menuda confianza” en sus formas tienen muchos…

Continuará…


Agradecemos nos comparta se reacción marcando cualquiera de las siguientes casillas. Bendiciones!