¿Cómo
leer la Biblia? 1° Parte
Escrito
autóctono
Para los gustosos de la saga de George
Lucas (Star Wars) -me incluyo-, saben que para tomarse el tiempo de mirar dicha
producción cinematográfica y comprenderla de mejor manera, necesariamente se
debe comenzar a ver desde el cuarto capítulo, no desde el primero, tal como
también se diera a conocer allá por 1977 cuando se estrenó y solo contaría por
mucho tiempo por cierto con esos segundos 3 episodios que resultaron un éxito rotundo.
Con el pasar de los años, sus productores
presentaron los que serían los primeros 3 capítulos de la saga en que se
brindan detalles que por supuesto se debían reservar para mantener el impacto
que provocaría el no conocerlos previamente, razón por la cual personas que la
vieron en orden -una vez disponible toda la producción-, dieron al traste con
la sorpresa lo que hizo que perdieran el interés por continuarla o finalmente
solo vieron algunas de las películas.
En fin, solo es un ejemplo de que si
queremos obtener el máximo provecho de ciertas cosas, no hay que tomarlas ni a
la ligera, y muchas veces ni en el sentido lógico por no estar diseñadas así.
No pretendo promover aquí el interés por ver
dicha producción ni tampoco recomendarla, queda a criterio de cada quien la
decisión de verla o no en vista de los supuestos problemas ético-religiosos, sobre
todo de movimientos legalistas extremos que dicen que un cristiano no debe “tocar”
o “gustar” de nada de este mundo para no “contaminarse”.
Dicho sea de paso la tal retórica no me
interesa. De hecho no comparto nada que tenga que ver con el legalismo
religioso.
El caso es que por “culpa” de la mentada “Guerra
de las Galaxias”, terminé hablando con unos inconversos sobre algo muy similar
que pasaba con la biblia, figúrese usted.
…Continuará
