Doctrinas y prácticas
evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 108
Continuación
Pero a la verdad son muchos los que pensando que ya son hijos de Dios porque no faltaron con ninguno de esos pasos protocolarios, entraron a las aguas sin haber dejado de ser pecadores y emergió de la pila bautismal un pecador mojado.
¿Pero acaso todo ello no basta?
Déjeme decirle con toda sinceridad y verdad, que realmente ni eso ni más de eso hace a nadie un hijo de Dios.
Si así fuera, tendríamos un compendio de pasos en la biblia que los definiera en una especie de listado de requisitos, pero realmente no existen los tales pasos en la Palabra.
¿Qué hace que Dios no fue “tan explícito y puntual” en un paso a paso respecto a la Salvación, como si lo fue para con el Arca de Noé, el Tabernáculo o inclusive el mismo Templo judío?
En realidad, no se trataba de pasos, ni de apegarse a un personaje (cosa que Cristo no se propuso), sino de creer un mensaje.
Si yo le digo “fe…”, eso dejará a más de uno con dudas más que con respuestas. Pero…, ¿alcanza a recordar que sin fe es imposible agradar a Dios… y que la fe viene por el oír y el oír por la palabra de Dios? El que tiene oídos para oír que oiga. (Hebreos 11: 6; Romanos 10: 17; Mateo 13: 9)
Aclaro que no estoy diciendo tajantemente que no tengan la Salvación muchos de los que leen que seguramente alguna vez procedieron con los “pasos” que les definieron aquellos que les predicaron. Más sépase que la fe es vital para que se posibilite una obra de Dios en el ser muy internamente. Cada uno valorará si eso fue lo que hubo o no en su corazón cuando alguna iglesia tradicional o predicador lo llevó a hacer lo que ellos daban por sentado que debían hacer las personas para salvarse y ser hijos de Dios.
Continuará…