domingo, 23 de abril de 2023

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. 30° Parte

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. 30° Parte

Continuación…

El mundo por su parte aprendió erradamente que la iglesia es un sitio por todo lo que se le ha dicho, porque para todos la iglesia es el edificio que visitan los que practican ciertas religiones en que celebran sus cultos y ritos religiosos ciertos días.

La costumbre de asistir a un sitio para honrar a Dios viene desde tiempos inmemorables; desde que se definieron los altares de piedra sobre los cuales se presentaban sacrificios de animales. Estos altares que eran ungidos o consagrados con aceite o vino, quedaban como el símbolo del lugar en que se había manifestado Dios y marcaban dicho punto como el encuentro con Él para recordarlos y continuar visitándolos con fines de adoración y ofrendas en honor a Él.

El paganismo hizo lo propio a su manera para presentar en sus propios altares, sacrificios humanos y rituales diabólicos en adoración a sus dioses.

Posteriormente vinieron los sitios altos en que se edificaban los altares y se levantaban imágenes que representaban a los dioses a los que se adoraba en ellos, todo como parte de ese paganismo religioso. Así mismo se utilizaban los árboles frondosos que simbolizaban la vida, bajo los cuales se realizaban ritos paganos y también se colocaban altares.

El hombre cambió la adoración al Creador por la adoración a la creación, a los ángeles y a seres místicos, haciéndose imágenes de ellos y construyéndoles templos para rendirles culto.

Entre tanto el pueblo de Dios (los judíos), quienes honraban a un solo Dios único y verdadero, recibieron de Él las instrucciones para edificarle un tabernáculo y siglos después un templo que contuviese el arca del pacto el cuál era símbolo de su presencia. Tanto uno como lo otro serían santificados, así mismo todo aquello y todos aquellos que estuvieran ligados con su funcionamiento. A esta tienda en el desierto y posteriormente al único templo autorizado por Dios y edificado en Jerusalén en el monte Moriah, se les llamó la casa de Dios.

Por supuesto, los judíos tuvieron un sitio llamado templo y casa de Dios y las religiones paganas también pero para sus dioses. Eran sitios a donde ir.

Continuará…