domingo, 29 de septiembre de 2024

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 105

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 105

Continuación

No comprenden que los mencionados como hijos de Dios al principio son los que tienen la línea ancestral de Adán quien poseía la simiente de Dios como su hijo y que continúa en Abel, no en Caín, y muerto él a manos de su hermano, se desarrolla desde su hermano Set que también la tiene para continuar por muchos de sus descendientes (Enoc, Noé y muchos más).

Se trata de un tema generacional de gente de pureza que caminaba con Dios pero que se desvirtúa en algunas líneas de ella al momento que esos descendientes comienzan relaciones impropias con mujeres hermosas de otras líneas generacionales alejadas de Dios, nunca se trata de un tema de ángeles. Y, por cierto, las mezclas de aquellas líneas generacionales tampoco producen gigantes, solo trajeron el agotamiento de la paciencia de Dios que respondió con el diluvio.

Un estudio serio y sin prejuicios nos lleva a la verdad de que estas interpretaciones, así como que Satán fue hijo de Dios porque se nombra en Job acudiendo junto con los hijos de Dios ante la presencia del Señor como si hacerlo le convertía automáticamente en hijo de Dios, son más imaginación fantasiosa de cosas que no establece la Palabra por ninguna parte y más bien las rechaza.

El diablo nunca fue ni es hijo de Dios ni puede engendrar a nadie. Sus hijos -como lo menciona la Palabra-, se convierten en tales porque le sirven, se deleitan haciendo sus malas obras y son unos mentirosos como él lo es.

Asegurar que el diablo o cualquier ángel es hijo de Dios, es una falacia de quienes defienden esa posición y no habla nada bien del Padre que dicen tener. Que yo sepa por lo que me enseña la Palabra, Dios nunca ha dejado ni dejará perderse a ninguno de sus hijos.

 

Veredicto: No acepte las cosas por tradición ni porque es lo que ha escuchado toda la vida… revise la Palabra con seriedad y por sobre todo con la guía del Espíritu Santo y permita que ella le conduzca por su Verdad que es la única fiel. Abandone la religiosidad y las fábulas.

 Continuará…


domingo, 22 de septiembre de 2024

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 104

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 104

Continuación…

Los millones y millones de ángeles que Dios creó son los mismos millones y millones que existen hoy y no hay ni uno solo más. Aunque tomen forma humana, no abarca la sexualidad su actividad ni en relación con los seres humanos ni entre ellos.

No encontraremos ángeles femeninos ni ángeles masculinos, sexualmente hablando.

Aunque en la biblia se mostraron siempre como varones, nunca como mujeres, eso no quiere decir que al ser semejantes a hombres pudieran o tuvieran implícito el don de procrear que si tenemos los seres humanos. Parecerse no quiere decir necesariamente ser igual o poseer los mismos atributos.

Nosotros podemos alcanzar el estatus de hijos de Dios por medio de Cristo, los ángeles son entes creados y siervos de Dios que nunca han sido ni serán sus hijos.

No olvidemos que la forma en que Dios engendra hijos es primeramente por su Voluntad (Juan 1: 12 y 13, Hebreos 1: 5) y segundo interviene necesariamente el Espíritu Santo quien es el creador y dador de la Vida (recordemos lo que pasó a la virgen María y lo que nos pasa a quienes creemos).

Los ángeles son entidades de vida por ser espíritus, creados así, no engendrados por Dios quien otorga su simiente en el proceso de a quienes engendra.

Mucho se ha dicho (desviado) por asuntos de mala interpretación de la Palabra referente a que la biblia menciona a los ángeles como hijos de Dios y que, en Génesis, el cruce de ángeles con seres humanos produjo a los gigantes. (risas).

Continuará…


domingo, 15 de septiembre de 2024

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 103

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 103

Continuación…

Los ángeles en el propósito de Dios fueron creados como seres poderosos para servirle en sus eternas intenciones. Son protectores del pueblo de Dios, un escalón más arriba en cuanto a los hombres que también fuimos creados por Dios, pero diferentes en esencia porque ellos son espíritus que pueden materializarse en forma de seres humanos, más nosotros somos almas vivientes (no espíritus) en un cuerpo terrenal a quienes se nos dio espíritu de vida para poder vivir. Por esta razón no podemos relacionarnos de forma íntima con los ángeles, somos diferentes formas de vida.

Está dentro del propósito de Dios que lleguemos a ser como ellos más no literalmente; se expresa desde la perspectiva de su poder y santidad, nunca iguales pues sabemos por la Palabra que seguiremos siendo almas vivientes que tendremos un cuerpo eterno y glorificado como el de Cristo, más los ángeles no lo tienen ni dejarán de ser espíritus, así como lo es Dios.

Los hombres somos beneficiados con la redención de nuestros pecados, los ángeles no tienen redención ni redentor; aquellos que pecaron cayeron en condenación ineludible por siempre.

Dice la biblia que un día juzgaremos a los ángeles (1° Corintios 6: 3).

Los ángeles fueron creados para estar delante del Señor en su presencia, nosotros llegaremos allí.

El anuncio del evangelio es un privilegio que nos atañe, los ángeles no participan de ello, aunque lo quisieran.

El rol angelical y el rol humano jamás se cruza ni se mezcla entre sí conforme nos enseña la Palabra. Nosotros en este mundo podemos reproducirnos según los procesos biológicos que Dios nos dispuso como humanidad, en cambio los ángeles no se reproducen entre ellos ni pueden copular con humanos porque son asexuados es decir no poseen ni necesitan sexo.

Continuará…


domingo, 8 de septiembre de 2024

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 102

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 102

Continuación…

Según las descripciones bíblicas de estos seres celestiales, sabemos que Dios estableció rangos de mando angelicales dentro de los cuales están los Arcángeles que tienen a su cargo millones de ángeles.

Pero también están los Querubines que sí se describen como alados y que están en rango mayor por sobre los Arcángeles y a cargo de ellos.

Por último, están los Serafines, quienes sí poseen juegos de alas que les cubren el rostro, sus pies y utilizan dos para volar (Isaías 6: 2, Apocalipsis 4: 8). En Ezequiel también hay alguna referencia a ellos sobre todo en los capítulos 1 y 10. Estos seres están más dedicados a estar en adoración permanente para con Dios y rara vez interactúan con algún ser humano.  

La biblia dice que satán es un Querubín y tenía a su cargo Arcángeles que a su vez comandaban legiones de ángeles. Estos completaban la tercera parte de la totalidad de población de ángeles que en número se habla de millares. Fueron arrastrados por el engaño de su Querubín grande y protector como lo era Lucifer y no conservaron su santidad.

Estos son los hoy demonios que operan en el mundo sumiéndolo en la maldad y el engaño.

Dentro de esa población maligna existen también ciertos ángeles tan malignos, que la Palabra los describe como presos en prisiones de oscuridad y que serán liberados en la época de la tribulación para esgrimir toda su maldad. Estos espíritus encarcelados son aquellos que Jesús bajó a llevarles un mensaje cuando murió y mientras su cuerpo yacía en la tumba.

Aunque la biblia no detalla dicho mensaje, suponemos que tuvo que referirse a un aviso de los tiempos que comenzaban de juicio sobre la tierra que han sido detonados a partir de la cruz; tiempos en los cuales ellos tendrán un rol decisivo en el mundo en poco tiempo (los últimos) cuando sus prisiones sean abiertas como lo describe Apocalipsis. 

Continuará…


domingo, 1 de septiembre de 2024

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 101

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 101

Continuación…

Tanto así que la imagen preliminar que se forma en nuestra mente acerca de los ángeles cuando los mencionamos o leemos inclusive de ellos en las Escrituras, es que son seres luminosos de vestiduras blancas con sendas alas en sus espaldas. Algunos les colocan auras y argollas de santidad en sus cabezas. Pero nada más alejado de la verdad.

Créame que cuando dice la Palabra que satán se viste como ángel de luz, se reveló en la forma descrita a muchos y los ingenuos pensaron estar teniendo una experiencia celestial tragándose la mentira que les dijo.

De la misma forma sucede para quienes vieron fantasmas o espíritus a semejanza de personas que murieron y creyeron literalmente estar en contacto con ellas sin entender que realmente quienes se les aparecieron fueron demonios que se disfrazaron como aquellos que murieron. Y terminaron engañados.

Muchos piensan erróneamente que los bebés que mueren se convierten en angelitos con todo y alas y se van para el cielo a reforzar la población de ángeles y a tocar arpa.

Mentiras de la tradición y la religiosidad.

La biblia recalca la aparición de ángeles en algunas situaciones mínimamente esporádicas como seres luminosos (Mateo 28: 1 - 3), en otras ocasiones resplandeció luz antes de su aparición como en el caso de los ángeles y los pastores cuando el Señor nació o de Pedro en la cárcel y en otras más se vieron vestidos con vestiduras blancas. Sin embargo la mayoría de las veces se presentaron como personas comunes y corrientes al punto de que quienes los recibieron no notaron nada diferente.

Probablemente nos podemos haber encontrado con ellos o tenerlos de compañía en no pocas situaciones sin percatarnos de que eran ángeles. (Hebreos 13: 1).

Pero salvo por alguna visión que tuviese y describiera alguno de los profetas bíblicos en que ciertos seres celestiales lucieron alas, -lo que tampoco es descabellado-, los ángeles como tal, no las tienen.

Continuará…