Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 105
Continuación
No comprenden que los mencionados como hijos de Dios al principio son los que tienen la línea ancestral de Adán quien poseía la simiente de Dios como su hijo y que continúa en Abel, no en Caín, y muerto él a manos de su hermano, se desarrolla desde su hermano Set que también la tiene para continuar por muchos de sus descendientes (Enoc, Noé y muchos más).
Se trata de un tema generacional de gente de pureza que caminaba con Dios pero que se desvirtúa en algunas líneas de ella al momento que esos descendientes comienzan relaciones impropias con mujeres hermosas de otras líneas generacionales alejadas de Dios, nunca se trata de un tema de ángeles. Y, por cierto, las mezclas de aquellas líneas generacionales tampoco producen gigantes, solo trajeron el agotamiento de la paciencia de Dios que respondió con el diluvio.
Un estudio serio y sin prejuicios nos lleva a la verdad de que estas interpretaciones, así como que Satán fue hijo de Dios porque se nombra en Job acudiendo junto con los hijos de Dios ante la presencia del Señor como si hacerlo le convertía automáticamente en hijo de Dios, son más imaginación fantasiosa de cosas que no establece la Palabra por ninguna parte y más bien las rechaza.
El diablo nunca fue ni es hijo de Dios ni puede engendrar a nadie. Sus hijos -como lo menciona la Palabra-, se convierten en tales porque le sirven, se deleitan haciendo sus malas obras y son unos mentirosos como él lo es.
Asegurar que el diablo o cualquier ángel es hijo de Dios, es una falacia de quienes defienden esa posición y no habla nada bien del Padre que dicen tener. Que yo sepa por lo que me enseña la Palabra, Dios nunca ha dejado ni dejará perderse a ninguno de sus hijos.
Veredicto: No acepte las cosas por tradición ni porque es lo que ha escuchado toda la vida… revise la Palabra con seriedad y por sobre todo con la guía del Espíritu Santo y permita que ella le conduzca por su Verdad que es la única fiel. Abandone la religiosidad y las fábulas.