domingo, 3 de diciembre de 2023

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. 62° Parte

Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. 62° Parte

Continuación…

Dice la biblia que Dios las recompensó haciéndoles bien y prosperando sus familias. Pero Dios no las premió por la mentira sino que recalca el pasaje que por temerle a Él. Así que no hay tal de que la mentira, aunque benefició al pueblo de Dios en esta historia, no fue avalada por Él aquí ni en ninguna parte de la Palabra.

 

Veredicto: La mentira llamada blanca, seguirá siendo la forma en que el hombre intentará esquivar el mandamiento del Señor llamando a lo bueno malo y a lo malo bueno. Por supuesto que no está bien, debemos eliminarla de nosotros y hablar siempre con la verdad.

 

28- Ayunar para ser un cristiano con más poder.

Es lo que buscan muchos al ayunar, poder para realizar maravillas, ser usados por Dios con prodigios y hacerse un nombre. Claro que habrá uno que otro que querrá poder para ayudar, para que se sanen los enfermos, para echar fuera a los demonios y que las gentes sean liberadas. Poder para que al predicar el evangelio tenga mayor efectividad, etc.

Pero la realidad es que muchos andan detrás de desviadas intenciones.

La verdad es que la razón de ayunar nunca fue para darle poder a nadie. Tampoco para liberar el poder de Dios. En otras palabras, no se trataba de alcanzar ninguna virtud divina, ni de hacer de Dios más Dios; más bien es un tema de despojo personal, de claridad en el andar. El ayuno no es por causa de Dios ni lo hará más presente sino por causa nuestra, que tan fácil nos desubicamos. Ayunar que por supuesto es no ingerir alimento, persigue esencialmente menospreciarse a sí mismo para que el propósito de Dios no tenga estorbo alguno. Nos lleva a liberarnos de cosas que no nos ayudan.

Continuará…