¿Se trata entonces de satanizar un local? Parte 3
Continuación…
Por su parte Dios no ve con buenos o malos ojos un local o una casa o cualquier lugar, pero sí a quienes están en ellos y sus actos. Un edificio sea cual sea, no es del diablo o de Dios, sino las personas que los frecuentan y lo que se atreven a hacer en ellos y por supuesto también fuera de ellos. Al final el sitio y su finalidad se lo dan los que los usan. En el caso de un edificio, hoy puede servir para una cosa, mañana para otra. Hoy tendrá un rótulo, mañana otro.
Respecto a una casa, hoy pueden vivir ciertas personas en ella, mañana pueden habitarla otras.
Entonces alguien aquí puede decir que la biblia presenta un local físico consagrado como santo y era totalmente material. ¡Cierto! Más sin embargo ya no existe. Eso se terminó. Por supuesto hablo del templo judío que fue destruido definitivamente en el año 70 de nuestra era y hasta hoy está así. No se ha vuelto a edificar.
Más veamos que después de la cruz, sucedió algo con el lugar y su importancia; dejó de tener relevancia en los planes y propósitos de Dios porque ya Él se proveyó de otro “sitio” y templo y santuario y casa, no hecho de manos de hombres y que es espiritual en el cual habita ahora, su pueblo.
El local dejó de tener preminencia. Jesús lo dejó por sentado cuando habló con la samaritana (Juan 4: 21). Antes de la cruz, era un sitio sagrado definido para un solo pueblo, poseía divisiones que limitaban la presencia de las personas según su estatus y función; quienes servían en él pertenecían a una raza particular de ese pueblo y debían cumplir con ciertas normas propias de su labor, vestir atuendos especiales, usar utensilios y muebles también particularmente definidos y santificados, fungir su ministerio en tiempos según Dios se los había previamente asignado.
Pero la cruz definió un término en definitiva de todas esas formas, días, cosas, sacrificios, rituales, raza específica y hasta pueblo escogido. Y por supuesto un fin al sitio, es decir, no solo al lugar escogido por Él en que se erigía aquella edificación siglos antes, sino también a la edificación misma como tal.
Continuará…