Doctrinas y prácticas evangélicas en el ojo del escrutinio. Parte 118
Continuación...
Piensan que las tinieblas huyen solo porque ellos lo dicen. Lo peor es que cuando hablan y no cae ni una hoja de un árbol, entonces levantan su vista a Dios "quien los dejó mal parados" o se atreven a decir que la gente es una incrédula y por eso Dios no hizo la obra… ¡¡Qué clase de engaño y patraña!!
Como si el universo tuviera que detenerse porque ellos lo dictaminan…
¡Falta de seriedad por Dios!
Esto proviene de doctrinas de iglesias y líderes carismáticos para hacer sentir a la gente especial y que tienen poder. Claro, sin asidero bíblico o totalmente mal utilizado. Está ligado a movimientos que promueven la prosperidad y el igle-crecimiento, pero en realidad la práctica de decretar no está en la Palabra, viene del ocultismo.
Hemos hablado en otras ocasiones de lo vital que es estar ubicados en los contextos y el propósito de la Palabra cuando nos enseña cosas.
Por ejemplo, si vimos a un Moisés, a un Josué, a un Elías o a cualquier personaje bíblico antiguo o inclusive al mismo Señor desafiar las leyes de la física, no quiere decir que todos podemos literalmente hacer lo mismo como si la naturaleza esté presta a escuchar y obedecer nuestra voz cuando se nos ocurre.
La biblia no promete por ninguna parte eso. Las palabras del Señor de mover montes de un lado a otro no es licencia para andar alterando la topografía de un terreno (risas). Es un tema de índole espiritual.
Muchos creyéndose reyes, piensan que su palabra es ley y hasta piensan que Dios corre a respaldar todo lo que ellos dicen. Nada más alejado de la verdad y risible.
Continuará…